EL PISO EN DEBOD

Este relato transcurre cuando me trasladé de Guadalajara (España) a Madrid, porque en el piso que vivía en Guadalajara, tuve unos problemas con los compañeros de piso y  ya no me sentía cómodo en la ciudad. Guadalajara está a 60 km de Madrid, que no es una distancia excesivamente grande. Una vez en Madrid conseguí una habitación con unos estudiantes erasmus. El piso estaba muy cerca del templo de Debod, que es un templo egipcio, que trasladaron piedra a piedra de Egipto a Madrid, ya que iba ser cubierto por las aguas, por la construcción de una presa. Es un monumento que recomiendo visitar, si alguien va de vacaciones a Madrid, ya que el entorno y el monumento me parecen muy bonitos. En el piso, mas bien era una casa de huéspedes, había predominio de italianos, había un poco de pique cuando se celebró la eurocopa que gano España. Al finalizar el año los que eran estudiantes erasmus se fueron a sus países. Cuando se fueron los italianos, el dueño  esta vez metió algunos alemanes, se reunían con sus amigos en el salón y solían traer la camiseta de la selección de Alemania y hablar en su idioma. A mi me llamo la atención, porque en aquella época estaba con medicación homeopática, ya que trataba de sustituirla por los antipsicóticos, por problemas que tuve en el pasado, la homeopatía es más natural y no tiene efectos secundarios. El homeópata me solía hacer escribir relatos, para conocerme, podía escribir relatos del tema que quisiera, yo solía escribir de la segunda guerra mundial, en especial del eje Alemania, Italia y Japón, estos relatos que escribía al homeópata, los hice antes de vivir con los italianos y alemanes en el piso de Madrid. En febrero fui de vacaciones a Galicia, donde nací. Cuando volví los alemanes se habían ido porque iban hacer reformas en el piso, el dueño me dio la opción de irme con él a otra casa de huéspedes, yo acepté como fue todo tan repentino, no tenía otra opción. Durante la mudanza, íbamos en el coche del dueño de la casa, con mis cosas, durante el camino iba pensando primero los italianos, luego los alemanes, faltaban los japoneses. Pues al entrar en este piso, me encuentro con una persona de rasgos orientales, a mi me sorprendió bastante, me dio el dueño mi habitación y en la habitación de al lado había otra persona con rasgos orientales, luego me enteré que no eran japoneses, uno era chino y otro coreano, dejo este relato como anecdótico de esta convivencia. Mientras escribo este relato estoy oyendo la canción big in japan del grupo alemán alphaville.

 

Juan Alberto Gonzalez Gonzalez
Últimas entradas de Juan Alberto Gonzalez Gonzalez (ver todo)

1 Comentario

  1. Daucuscarota dice:

    «A mi me llamo la atención, porque en aquella época…»

    Aquí te hace falta un tilde en «llamó». Y la coma, sobra. De hecho, la mayoría de las comas, sale sobrando.

    Cuidado con el uso de minúsculas en nombres propios, como Alphaville o Japan, y la ausencia de comillas en títulos de canciones, «Big in Japan».

Deja un comentario

Tu dirección de email no será publicada