¡QUIEN ME DIERA…!

Mirar por un «bujerito»

y ver cómo te levantas

con esa ilusión de niño

que se leyera en tu cara.

 

¡Quien me diera…!

verte tras una pared

ver restregarte los ojos

pensando en qué día es.

 

De tu cama dar un salto

ir a hacer tu primer pis

luego de lavar tus manos

encontrarte con tu espejo.

 

Buscar como cada día

reflejada en él tu rostro

y mirar que tu sonrisa

hoy está más alargada.

 

Más grande que la de ayer

hoy te sentirás más guapo

más alegre y más feliz…

dirás: ¡porque yo lo valgo!.

 

Y te pondrás muy nervioso

pensarás que estás soñando

pues ayer costó dormirte…

de lo impaciente que estabas.

 

Por tener un día distinto

a todos de los del año

un día especial cariño…

de los que soñaste tanto.

 

¡Quien me diera…!

¡lo que daría por verte!

aunque sólo unos segundos

desde una esquina otearte.

 

Y, desaparecer luego…

con tu sonrisa en mi cara

como si fuera tu espejo

llevarla allí retratada.

 

Y admirarla cada día…

cuando en el mío mirara

que nadie me la tocara

que nunca se me borrara.

 

Cómo siempre la recuerdo

como tanto me gustaba

como la sigues teniendo

cómo la sueño en mi almohada.

 

 

 

 

 

 

.

 

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