Envidia
- publicado el 20/01/2014
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«Real»
He mirado al cielo durante muchos años, y he encontrado respuestas increíbles, pero inquietantemente reales.
Ahora miro al horizonte:
para ver el amanecer y el atardecer,
el inicio y el final,
la mentira, y la verdad.
Debo mirar al horizonte para hallar una respuesta a aquello que llaman «real»
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Llevaba un tiempo sin escribir, pues he andado un pelín ocupado, pero hoy tuve un ligero atisbo de luz inspiradora y esto fué lo que salió.
?por qué está la respuesta en el horizonte? es por mirar con perspectiva? qué tiene que ver la verdad y la mentira con el principio y el final? es porque la verdad es el final de la mentira?
Me has hecho reflexionar bastante, un saludo!
Son análogías, por lo demás entendió bastante bien la primera (la de la perspectiva) el resto es la dualidad entre el alba y el cerpúsculo, inicio y final del día, y demás, algó así como un Ying-Yang a gran escala
Si ya se que en «algo» se me escapó una tilde
Me gusta mucho la dualidad del relato. Como introduces pequeñas dualidades para hablar de una mucho más grande: Real o imaginario.
Me alegro mucho de haberlo leido. Pero te planteo una nueva duda…
¿es el dos mas importante que el tres? Siempre hay cielo y tierra, fuego y hielo, vida y muerte,… pero el tres es un símbolo muy importante: la trinidad, la geometría es triangular, las tres dimensiones…
¿Por qué dualidad, o por qué no?
Puessss…. veamos.
No hay Máximas que sean mejores que otras, sinembargo escogí la dualidad pues de alguna manera en la naturaleza los patrones tienden a encontrarse en números pares, y siendo el dos un número par tan prodigioso (es decir, el único primo par, y el único que tiene implícita la expresión completa de un número) decidí tomarlo como ejemplo para el texto.
Soy conciente que hay algunos patrones que no son pares, como el trebol (Aunque tiene 6 centros y existen algunos de 4 hojas(si, si existen)) o el arcoiris (que dependiendo de cómo se mire el lila es efecto de la difuminación y no un color como tal)
Sinembargo insisto en que no tengo preferencias en las máximas que se presentan en la vida o la naturaleza, o cualquier otro medio, pues todas son dignas de admiración, reconocimiento y son todas, sin exepción dignas de observación y apreciación.
Jo, macho,… leer tu comentario es como leer otro relato… que facilidad para la expresión 😛
Pues mira, yo soy más de tres.
Mi cabeza es un poco más cuadriculada (debería de decir triangulada?) El tres no es sólo simbólico sino que te da la visión de aceptar matices. Eso que se dice…
«No solo es blanco o negro… es gris» eso implica renunciar en cierta medida a lo que significa la dualidad, quizas diría «falsamente» que es el modo de abrirse pensamiento. No me gusta en general lo que la dualidad implica. Bi-partidismo, vida o muerte, esto o aquello,… me parece que siempre debe haber algo mas, una oltra cosa!
Ademas yo soy estudiante de arquitectura, como algunos ya saben. En mi cabeza todo debe estructurarse y ordenarse, independientemente de que en el exterior no lo sea (tendriais que ver mi cuarto… es un desastre) y quizás el metodo de la triangulacion me ayuda muchas veces en un sentido metafórico…
Aun asi… me gusta que compartamos ciertas opiniones. Y ademas, creeme, yo pienso que seguro que alguien da una tercera opcion 😛
Insisto: Todas las máximas que se presentan en la naturaleza son dignas de observación y apreciación.
Aclaro: No tengo preferencia por ninguna, pues todas son dignas de obsrvación y hermosas cada una en su medida, particular.
Concuerdo: Es genial poder compartir opiniones.
Claro, cada número que se ve en la naturaleza tiene su enseñanza.
El dos son los contrarios y el 3 es la fuerza que los une para crear algo nuevo.
así la electricidad para que de luz necesita de polos positivo, negativo y neutro.
Hombre mujer y amor si lo quieres con otro ejemplo etc.
Me has recordado a los amaneceres que iba a ver en el lago de Maracaibo con la abuela Elena.
Nos amaneceres y atardeceres en el Caribe son uno de los más grandes tesoros que tenéis allí en serio.
muy chulo el relato