Antes del desayuno

 

Sin despertarme, de la cama se levantó, fue al baño, se bañó…

De reojo la vi secarse cada gota de agua y de sudor, aun olía a mi…

La alegría lleno mi alma y fingí dormir…

El espejo fue mi cómplice, para ver su cuerpo en movimiento.

El tiempo paso, no me di cuenta de la hora, no me di cuenta de los días…

No me di cuenta de los años, no me di cuenta de la vida…

Me dio un beso en la frente, me despertó, ¡el desayuno está listo! dijo

Y en los labios me beso, cada mañana.

Alan del Cid
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