Las Pisadas de una sombra

Cada cierto tiempo, una sombra con sus pisadas, hace aparición, en la casa de la abuela.

La sombra deja pisadas y se notan a simple vista, aunque algunas veces se tiene que mirar, más allá del alma. No lastima, solo atemoriza,  sin embargo es mejor no provocarlo…

La pude mirar por primera vez, cuando estaba bajando las escaleras y él estaba atrás, voltee, y mire hacia donde se hallaba, me toco el hombro y dice: soy tu sombra.

Janeidith Tatiana Jerez Sandoval
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