Puesta de sol

El sol, perezoso comienza lentamente a retirarse. El aire, perfumado de salitre y brea parece hacerse más denso; sopla una suave brisa que refresca los ardorosos cuerpos y sosiega el espíritu. Por momentos la noción del tiempo se pierde, un algo intangible parece suspendido en el paisaje, al fondo Las Cíes ponen un punto y aparte al horizonte. La armonía de las suaves olas acunan los sentidos apaciguando la almas, la paz es un tangible, una certeza absoluta y real por un momento. Cierro los ojos y me dejo llevar por el ensueño…

Doa

Baiona 14  Agosto 2004

Stradivarius
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