Para gustos, los olores.
- publicado el 28/02/2020
-
El loco
El loco
Vi un muchacho cuyo aspecto me sorprendió en el patio del manicomio. Tenía el pelo largo y le caía sobre la cara cubierta de una fina e insipiente barba. Me llamó de inmediato la atención porque no miraba en forma huidiza, donde dirigía la mirada se quedaba un rato observado, como si meditara sobre todo lo que lo rodeaba. Sostenía la bata que rodeaba su evidente delgadez como si fuera el sudario de un revivido.
Lo saludé y el hizo lo mismo.
-¿Por qué estás aquí adentro?- le pregunté.
-He hecho todo lo posible para que me encierren. Aborrezco la sociedad. Me he hecho encerrar para escapar al mundo asqueroso que nos rodea, para huir del consumo, del materialismo atroz, del individualismo alienante.
-Entiendo- dije pensativo y me senté a su lado.
-¿Y usted, por qué está acá adentro?- preguntó luego de unos segundos.
Yo le respondí mirándolo a los ojos.
-Ah, yo sólo estoy loco.