EXSCIND – Memorias de una Paladín –

¡Jocoso!, algo gracioso siempre alegra mi día a día, alguien o algo me da risa, hoy no es la excepción. Vi caer a golthere intentando una acrobacia en el entrenamiento, En verdad fue muy gracioso ver su expresión jajaja. Soy una enana con gracia eso nadie lo puede negar, entreno para ser una gran maestra en la luz y proteger el mundo de la oscuridad. Las nuevas leyes que el Bancal de la Luz propuso a las naciones del continente de Exscind llevar a cabo una avanzada que implica tener un sacerdote y paladines al servicio para afrontar problemas relacionados con la oscuridad y sus derivados.

Quiero entrenar cada día y reír cada día, deje mi vida cotidiana en la ciudad, prefiero luchar por un propósito, toda filosofía que nos enseñan contiene un significado para mi vida. Aunque algo de mi ser siempre ha tenido la necesidad de reír y ser divertida, un paladín no debe tener sentimientos que no sean el amor al prójimo para ayudar con el poder de la luz. Jajaja, es divertido aprender casi todo me causa gracia, aun así, me convierto en una gran estudiante. Comprendo el entendimiento de la luz y lo que la Fe dicta, soy curiosa, ya saben me gusta aprender mucho.

Una noche días atrás escuche hablar a unos obispos sobre el calendario antiguo, un artilugio que los antiguos seres llamados dragones decían usar para prever lo que sucedería en cada ciclo años más adelante. Una inmensa roca tallada por quien se dice fue el único dragón a favor de la humanidad entera, shara´nox un dragón de escamas grises con aspecto anciano capaz de enseñar la magia oculta de los dragones. Es interesante saber que puede pasar para el bancal en años venideros, y me causa curiosidad.

Debo ir a descansar ya, el entrenamiento es implacable, la meditación, la canalización de luz y las pruebas físicas son muy duras pero las adoro. Soy la mejor de mi rango y estoy a punto de hacer la prueba de Fe la cual me otorgaría el título de paladín. Entrando a los dormitorios de mujeres logro divisar una sombra que se moviliza por el pasillo principal. Me detengo a observar, evito que sienta mi presencia, empiezo a seguirle caminando despacio hasta ver quien puede ser. Al llegar al final de pasillo cruza para dirigirse a las escaleras como si deseara escapar. Apresuro mi paso hasta el borde llegando a la esquina del pasillo, lentamente miro para evitar que me vea. No veo a nadie, miro las escaleras y la madera no tiene señales de haber levantado polvo ni hizo ruidos. Rascando mi cabeza me pregunto si fueron ideas mías.

Empiezo admitir que quizás fue mi imaginación y al darme vuelta para regresar a los dormitorios un ser espectral con un rostro trasparente de un hombre viejo me mira fijamente y dice unas palabras que no logro entender es como si el tiempo se volviera más lento, sus palabras siguen el ritmo en el cual me encuentro, espantada y en shock intento concentrarme en lo que dice, pero es prácticamente imposible el miedo me tiene atada.

La aparición se vuelve cada vez más transparente y se desvanece con una expresión de miedo y estrés, como si quisiera que le entendiera y supiera que no logro entenderle, pero no hay nada que pueda hacer, simplemente nunca pase por algo así. Definitivamente deja de verse y mi cuero empieza a relajarse, caigo arrodillada apoyándome con mis manos mirando el entablado del pasillo y la alfombra que decora de punta a punta, veo borroso, siento que todo me da vueltas, no puedo concentrarme bien estoy sudando y jadeando, respiro profundo por un rato logrando moverme, aunque temblando sin poder coordinar logro llegar a los dormitorios. Las otras mujeres en sus camas ya dispuestas a descansar me ven aterradas y se abalanzan a sostenerme. Siento un descanso que me puedan sostener que me desplomo colapsando, hasta la mañana siguiente que despierto. Veo a mi maestro a mi lado sentado, me ve con esa cara de cariño y preocupación. Siempre se preocupó por cada uno de nosotros y nos enseñó la rectitud que la luz demanda. En verdad aprecio que este cuidando de mí, al preguntar por como estoy le digo que bien pero mi mente aún tiene los recuerdos de ayer.

Fue una noche que jamás olvidare, ¿Quién era?, ¿Por qué se presentó ante mí y que quería decirme? Solo tengo muchas dudas, mi mente nublada por inseguridades me hace bajar mi ritmo y mi entrenamiento se hace mas difícil. Mi maestro lo sabe y se preocupa que quiera desistir de ser un caballero de la luz. Aunque lo deseo con mi alma debo solucionar esto lo más pronto posible si no, no seré capaz de continuar mi entrenamiento, aun que fui una de las mejores, se acerca la prueba de Fe, tengo miedo que todo esto haga que fracase.

Nine

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