Amont – Capítulo 1

Este es una de las partes de un relato largo que estamos escribiendo entre Lascivo y Champinon. Para más información y ver todos los capítulos, pulsa el enlace.

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– Pero, ¿Por qué precisamente él? No es más que un perdedor.

La pequeña pantalla que tenían delante mostraba la figura de un hombre dentro de una habitación de hotel. Estaba tumbado sobre una cama sin sábanas, con las manos detrás de la cabeza. A su alrededor, sólo el punto de iluminación de una bombilla tintineante demostraba que aquello era habitable. Las paredes desconchadas dejaban ver las tuberías a través de los huecos que las desnudaban, las numerosas humedades del techo dibujaban formas sombrías y siniestras, y como mobiliario, tan solo un cenicero lleno de colillas, una silla, una cama y una neverita de cincuenta centímetros de altura.

Los años habían pasado de manera muy cruel por el cuerpo de Richard Beck, y pese a sus casi sesenta años las arrugas deformaban un rostro consumido por los vicios y las drogas.

– Ha perdido peso desde la última vez que le vi – continuó la misma voz.

En ese momento Beck se reclinó, cruzó las piernas sentándose sobre la cama en posición de medio loto, y alcanzó su paquete de cigarrillos Dunhill. En la almohada, a su lado, descansaba su Colt o491, su pistola de calibre .45 que le había acompañado durante toda su carrera como militar y policía. Ahora era un objeto decorativo en su vida, el cenicero tenía mucho más uso realmente.

Se puso un Dunhill en la boca y lo encendió con una cerilla, para recostarse de nuevo musitando algo en voz baja y agarrar la Colt, con la que comenzó a jugar.

– Sabes que es el mejor para el trabajo, Nathan – ésta voz era mucho más grave, cargada de experiencia, o quizás de odio.  – Ahora no tiene nada. No tiene trabajo, es un inútil. Cuando se fuerza una jubilación de un activo y no se le ofrece un puesto de oficial, normalmente acabas con un nuevo tipo armado en la calle, que acaba dando por culo en cualquier lado.

– Como si eso supusiera alguna diferencia. Ojalá usara el arma y nos quitara un par de problemas de encima.

En la pantalla, Beck se levantó tras apurar el cigarrillo. Fue hasta la nevera, sacó un petate de ella y, tras dar un largo trago, se colocó su gabardina de cuero.

Abrió la puerta. La habitación daba a una calle oscura. Afuera, la temperatura era lo suficientemente baja como para que la nieve que había sobre la calzada se mantuviera sin dificultad. El humo del tabaco que exhalaba por la boca pasó a ser vaho por el frío.

Avanzó y salió de la habitación, pisando la nieve que se quejó bajo su bota. La pantalla por la que le observaban, tintineó un par de veces y de ser una cámara fija en la habitación, cambió a un ángulo opuesto, viéndole entonces desde fuera, mientras éste cerraba la puerta a su espalda.

Caminó a lo largo del callejón, mientras encendía otro Dunhill.

– ¿A dónde irá ahora?

– Seguramente vaya a buscar un poco más de esa droga que consume. No entiendo cómo ha podido agarrarse a una mierda como esa. Es la basura más grande de la calle, «Dietilaminanfetamina» o algo similar.

– ¿Estás seguro de que es el más indicado para el trabajo? No es más que un drogata, un viejo y ahora también un paria.

– Precisamente. ¿Quién lo iba a echar de menos? Es perfecto para el trabajo.

– En eso te doy la razón amigo mío. Sabe manejar un arma, y es un hombre sin vida. Además, dudo mucho que sea una persona que haga demasiadas preguntas. Acuérdate que eso es lo más importante. Necesitamos efectividad y trabajo. – hizo una pausa prolongada mientras estudiaba las posibilidades. –  De acuerdo. Hagámosle pues una visita al señor Beck. Espero que se alegre por la oferta.

– ¿Tiene acaso una alternativa?

Ambos personajes comenzaron a reír. A través del cristal del monitor, se veía como Beck se acercaba a una mujer, una prostituta de cabellos de color del fuego y que pese a la escasez de ropa, aguantaba el frío gracias a la cantidad ingente de drogas que seguramente hubiera consumido. Le saludaba efusivamente como si se tratase ya de un encuentro habitual. Un pitido agudo resonó en el eco de la gran sala donde se encontraban; y la imagen desapareció, dejando tras de sí un punto blanco en un fondo tan oscuro como la propia habitación.

Champiñon
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6 Comentarios

  1. Lascivo dice:

    Juas! Me encanta! La trama va a ser tan cojonuda… Me ha gustado mucho, aunque no quiero poner aquí ninguna crítica, ni positiva, ni negativa. Ya que trabajamos juntos, que sean los demás quienes opinen.
    La semana que viene, capítulo 2 a cargo de Lascivo.

    PD: Xplorador, si ves esto, no he tenido tiempo de leer la 4º y 5º parte. Pero juro que lo voy a hacer y a comentar.

    Saludos!

    1. champinon dice:

      Gracias, la verdad no sabía como ibas a reaccionar,… asi que ya sabes, paso testigo… 😛

      Sigamos dándole a esto… waaaaaaa!!

  2. astharea dice:

    Wow! Menudo giro!
    Mola, no me esperaba algo así, a decir verdad.

    Aunque claro… Ahora también me quedo con ganas de saber qué pasó con… La chica de antes y… El malvadáceo ese que les amenazaba… Jum… ><

    De todas maneras, la ambientación me gusta mucho, es tan… Deprimente, decadente, oscura no sé… Que mola..! Es como si el personaje, que en el preludio parecía lleno de ilusiones y esperanzas, se hubiese llevado más de un golpe en la vida, y ahora tanto le dé el que llueva o haga sol…

    Espero leer más de ambos! ^^

    Molaría que se supiese más del pasado también… (Lalalahh, dejándolo caer… xD)

    1. champinon dice:

      Mola leer este comentario, pork hay cosas que nombras que Lascivo y yo tenemos en cuenta pero que aun no vamos a desvelar. Se hablará de su pasado? No lo sé, seguramente se vayan dando pistas. Sobre la chica, seguramente también… hay varias sorpresas preparadas. Y se irán metiendo cosas progresivamente, lo importante es que os vaya enganchando y nos animeis a que sigamos (:P)

      Gracias por el comentario! Ahroa metele presion a Lascivo para que saque el otro lo antes posible (que yo tardé mucho, demasiado xD )

      1. astharea dice:

        Eso de meter presión..
        Me hace pensar en mí como una típica editora…

        Oh no… Yo no quiero ser eso!! ><

        Pero…

        Lascivo, escribe! Escribe!!! Escribeee!!! ù__ú

  3. xplorador dice:

    Me gusta…Un giro inesperado, una estética sórdida, dos voces que mueven los hilos tras una pantalla, un paquete de cigarros Dunhill y un colt. ¿Qué más se puede pedir? Sí, tenemos historia.

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