Desde mi tristeza…

Desde mi tristeza… hoy escribo,

mía es, porque sólo yo la siento,

sufriendola en mi tenerla dentro

por ser mía… única y exclusiva.

 

Tristeza «impalpable» y «ciega»,

a otras «manos» que no palpan…

y a otros «ojos» que no miran….

con disfraz… ¡ de una sonrisa !.

 

Tristeza en un «rincón» nacida

no se si… la siento en mi alma.

no sé si…la noto  en mi cuerpo

en los dos … ¿quizás pariera?.

 

La que a gritos ó en silencio llora

la que rompe tímpanos su ruido

como el desgarrar un trapo viejo

con fuerza al lado justo de tu oido.

 

Como en la tormenta los truenos,

no dando tiempo en arbol mi cobijo

ni corriendo al cobijo de tus brazos

y aún menos tus abrazos cobijarme.

 

Asustada te sientes ya hace años

te acostumbras a verte así la cara

día a día te sientes más frustrada

impotencia de no poder cambiarla.

 

Por muchas promesas que no hablan

por cientos de te quieros a destiempo

lo cierto es que cuando lo necesitaba

a mi lado para consolarme él no estaba.

 

Tarde es ya para curar tamaña herida

que aún ha ído creciendo con el tiempo

si algo sano había antes en mi cuerpo,

gangrenó sin demora… por completo.

 

Con vendajes me la envuelvo cada día

apenas me repugmo y me doy grima,

a su olor nauseabundo me acostumbro

pronto cubro como si fuera su vestido.

 

Por mucho que me quieran mis amigos

por mucho que me mime mi familia…

la falta que me has hecho en estos años

fué la causa  que se infectara mi herida.

 

 

 

 

 

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